Langreo, el único de los grandes concejos asturianos que aún no había sido afectado por los cierres perimetrales del sistema de restricción del Gobierno del Principado, caerá el miércoles bajo las medidas del sistema “4 Plus”, que incluyen además la clausura del servicio en el interior de los establecimientos de hostelería. El concejo cabecera de la comarca del Nalón había sorteado el cierre en multitud de ocasiones desde que la Consejería de Salud impuso a mediados de enero su modelo de contención de la pandemia localizado por concejos, pero ayer sus cifras de incidencia y control sobre los contagios aconsejaron finalmente el cierre. El municipio tiene especialmente disparado el dato de casos acumulados en mayores de 65 años –536 por cada 100.000 habitantes en los últimos catorce días, muy por encima del límite, fijado en 195– y es además el tercer concejo de Asturias con mayor incidencia en el mismo indicador para la población en general –365, por encima del límite de 325.
También lleva tres días consecutivos con el rastreo más descontrolado de lo que debe, si por eso se entiende tener la trazabilidad –el porcentaje de casos de los que se tiene identificado su origen– por debajo del 75 por ciento. Cumple asimismo seis días con la positividad, o el promedio de pruebas con resultado afirmativo, por encima del ocho por ciento y todos esos criterios han activado su acceso a las restricciones asociadas al “4 Plus”.
Se da la curiosa circunstancia de que el Ayuntamiento de Langreo fue uno de los primeros a los que la Consejería de Salud advirtió del cierre al poner en marcha el nuevo modelo de medidas anticovid por concejos, allá por el 16 de enero pasado. El municipio ha sido hasta ahora, sin embargo, el único de los seis con más de 30.000 habitantes que sorteó la tercera ola sin cierre perimetral, ni clausura del interior de los bares, ni ninguna de las medidas adicionales de contención de la movilidad y las reuniones que impone el sistema “4 Plus”. Pese a tener los indicadores disparados –lleva desde principios de febrero con la incidencia de mayores por encima del límite establecido–, se libró varias veces, casi siempre gracias a sus datos de trazabilidad, que ahora también han cedido. Langreo se une así a Siero, el único municipio que permanece cerrado y el único al que se le ha aplicado el sistema dos veces.
Asturias alarga la incierta “meseta” en la que se ha instalado la incidencia del coronavirus en la región después de notificar ayer noventa casos correspondientes a diagnósticos del pasado sábado. El impacto acumulado, el quinto más elevado de España, se mantiene estable, sin los repuntes que empiezan a percibirse en otras regiones, pero sin bajar tampoco de los niveles del riesgo considerado “alto”. La tasa de positividad permanece en zonas inferiores al 5 por ciento recomendado –el 4,41 después de 2.606 pruebas diagnósticas– y lo que sí enfila un leve descenso es la ocupación hospitalaria, que ayer registró 15 ingresos en planta, uno en UCI y cinco altas y pese a seguir en cotas elevadas –174 pacientes en planta y 70 en unidades de críticos– ha vuelto a los niveles que tenía a principios de enero. Ayer fallecieron cuatro personas, tres mujeres y un hombre, entre 74 y 92 años.
De los últimos días inquieta el “leve ascenso” registrado en Gijón, que acapara un tercio de los datos notificados ayer, y el aumento de los contagios registrado en los últimos días en Llanes.