Un futuro con tejido económico que permita a los alleranos seguir viviendo en el concejo, explotando todas las singularidades y potencialidades del terreno. Este es el objetivo con el que el Ayuntamiento de Aller ha diseñado un ambicioso plan turístico de 2,5 millones de euros, para el que además ha contado con los vecinos y con los empresarios del sector. El resultado: un proyecto que actuaría sobre todo el concejo, desde Moreda hasta Cuevas, con una serie de proyectos singulares, todos ellos enfocados a una transformación del municipio hacia un turismo sostenible. Ahora debe de ser el Principado el que decida, en unos días, si el concejo allerano entra dentro de la selección final para optar a una ayuda del Ministerio de Turismo que financie esta planificación. Cotobello, les Foces del Pino, el Texu de Santibáñez o la Cascada de Xurbeo son puntos en los que el Gobierno local pretende actuar, para reactivar un sector, el turístico, fuertemente golpeado por la crisis del covid.

Itinerario planeado por el Ayuntamiento de Aller

La propuesta presentada por el Ayuntamiento de Aller –“Plan de Sostenibilidad Turística de los Valles de Aller. Nuevas miradas al paisaje”–, contempla actuaciones enmarcadas en seis ejes programáticos a ejecutar en tres anualidades. La actuación más cuantiosa en lo económico, con un coste de 450.000 euros, sería la recuperación turística del camino real entre Moreda y Cuevas (Felechosa), un itinerario en el que se contempla también la creación de una red de miradores fluviales. En el plan también se prevé la creación de un sendero sensorial interpretativo del agua en el camino de acceso al Monumento Natural de las Foces de El Pino y una intervención en la Cascada de Xurbeo para mejorar sus accesos y la experiencia turística, instalando una iluminación especial que realce, más si cabe, la belleza de este paraje allerano.

El proyecto encargado por el Ayuntamiento no solo se centra en la parte central de la ruta, sino que también busca poner en valor los valles como Ruayer. En este caso, se pretende construir una pasarela en la pared de roca del desfiladero de les Foces de Ruayer, para que los visitantes puedan disfrutar de este espacio natural de forma más intensa. Además, se crearán senderos sensoriales de la flora y se instalará un sistema de videomapping e iluminación nocturna en el Texu de Santibáñez.

Otra de las inversiones más importantes se llevará a cabo en Cotobello. Una de las cumbres más emblemáticas de Aller, no solamente por sus espectaculares vistas, sino también por el significado de la propia subida en el ámbito del ciclismo, ya que la cima lleva el nombre de uno de los corredores más importantes de la historia de Asturias: Chechu Rubiera. Con el fin de potenciar este espacio, el plan turístico incluye 175.000 euros de inversión, que se emplearían en la construcción de un mirador panorámico que se convierta en un polo de atracción turística en sí mismo para el visitante. Experiencias similares, y que han inspirado al concejo allerano, se pueden ver en países como Austria.