El casco urbano de Lena acogió durante el fin de semana un mercado medieval. Más de veinte expositores de gran variedad se reunieron en el barrio de Santa Cristina. También hubo atracciones infantiles para disfrute de los más pequeños. El objetivo cumplido de esta iniciativa era alegrar el inicio del verano en el concejo lenense tras la suspensión por segundo año consecutivo de la tradicional fiesta de El Corderu, la gran romería del prau Llagüezos. Así, los vecinos disfrutaron de un fin de semana en el que Lena comenzó a recuperar la normalidad tras la crisis sanitaria.