Los puntos de vacunación lo venían constatando en los últimos días y ayer la tendencia solo hizo que incrementarse. El rechazo a la vacuna de AstraZeneca, entre los citados para vacunarse en Asturias, está sufriendo de los mismos recelos que en muchos otros puntos de Europa y ello generó que ayer «ayer hubo muchas citas previstas, entre la población citada de 65 a 64 años, que no acudieron», según dijo la directora gerente del Servicio de Salud del Principado (Sespa), Concepción Saavedra. «Pensamos que está relacionado con esta situación. Lo que se hizo en algunos puntos fue llamar a otras personas de esos listados de edad para avanzar en la vacuna. Hay que dar tranquilidad. Los estudios demuestran que, realmente, en ese grupo de población de 60 a 65 años los riesgos son casi inexistentes y queremos dar tranquilidad y seguridad, pidiendo a las personas citadas que acudan a los puntos de vacunación», ahondó Saavedra.
De hecho el plan del Principado respecto a la vacunación con AstraZeneca es el siguiente:
«Para esta semana se acabará con la cohorte de 65 años y se va a vacunar también esta semana a los de 64 años. Y la idea es seguir llamando a los de 63 años. De ahí para abajo (hasta los 60 años, que es el nuevo tope que se le ha puesto a la vacuna de AstraZeneca, dependemos de cuándo se reciban más dosis y no sabemos cuando llegará», comentó Saavedra.
También en ese punto insistió Rafael Cofiño, director general de Salud Pública: «El factor fundamental del riesgo es la edad, por eso hay que vacunar cuanto antes a las personas de más edad. Y debemos recordarle a la población que el grupo de 65 a 63 años supone ahora un factor de riesgo de ingreo en las UCIs. Es fundamental seguir vacunando con las vacunas disponibles y con los criterios de priorización establecidos».
Respecto a las segundas dosis de AstraZeneca a quienes ya tienen inoculada una parte de la vacuna, en Asturias no hay una postura decidida y se quiere esperar a lo que se decida esta tarde en el grupo de trabajo de expertos.
¿Por qué este nuevo giro alrededor de la estrategia de vacunación con AstraZeneca? Todo se precipitó tras un primer comunicado emitido por la Agencia Europea del Medicamento (EMA), que reconoció que existe “un posible vínculo” entre las personas vacunadas con AstraZeneca y los casos muy raros de trombosis venosas cerebrales registrados en varios países. Este avance del dictamen de la institución de expertos de la UE obligó a mover ficha en España. Y las dudas respecto a la vacuna se establecen ahora en capas más bajas de edad, no en las más altas, como al principio. ¿El motivo? Que la mayor parte de los casos de trombos vinculados al fármaco se dan en mujeres menores de 60 años, tal y como confirmó ayer la directora ejecutiva de la EMA, Emer Cooke. Aún así, aclaró que “no se han confirmado factores de riesgo específicos” debidos al género, edad o condiciones médicas previas.
Esa falta de constatación científica de una relación de este “efecto secundario muy raro” –así lo ha catalogado la EMA– con una edad o sexo concretos ha servido para que Europa no se “moje” marcando una directriz para la estrategia de vacunación de los diferentes países. Simplemente, confirma la vinculación de raros casos de trombosis con la vacuna y recalca que el beneficio de la misma sigue siendo mucho mayor que los riesgos. De ahí que la UE seguirá siendo un crisol de criterios dispares respecto al uso de la inmunización de AstraZeneca.