El Ayuntamiento de Mieres, gracias a la estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (DUSI), cuyos proyectos financia la UE al 80% con Fondos Feder, seguirá con su plan de mejora del barrio de Oñón. El Consistorio ha sacado a licitación la segunda fase del proyecto, que conlleva una actuación en la calle Sacramento Gutiérrez Concha, y que consistirá en la mejora de la accesibilidad y la integración de esta zona en un proyecto de barrio. El total, incluyendo impuestos, el presupuesto de licitación asciende a 264.832,74 euros. Tras terminar el plazo de presentación de ofertas, el consistorio mierense está ahora analizando las propuestas para adjudicar los trabajos de esta segunda fase.

En el documento técnico incluido en la licitación, los técnicos municipales, que elaboraron el proyecto, explican el estado actual de la calle, y ponen énfasis en los déficits de accesibilidad para los peatones. Además, se señala también que los edificios de titularidad pública en la calle –la nave del servicio de limpieza y la Escuela Infantil Les Xanes– presenta un notable deterioro en sus fachadas. Por ello, el proyecto se basa en “implementar una mejora de la accesibilidad en el tramo de la calle Sacramento Gutiérrez Concha comprendido entre las calles Escuela Capataces y Numa Guilhou, de tal manera que esta disponga de un recorrido accesible en toda su longitud”. El documento señala que también “se pretende acondicionar las fachadas de los edificios de titularidad pública de la propia calle, actualmente deteriorados, mejorando de esta manera el aspecto de la calle y de todo el entorno”. Adicionalmente también se sustituirán los cierre tanto del nuevo parking de Oñón como de las parcelas de la zona.

La actuación incluye la construcción de una acera en la parte izquierda de la calle, la más cercana a los edificios. “En dicha acera se dispondrán rebajes que permitan el acceso peatonal al estacionamiento de Oñón mediante pasos de peatones, adecuando el ya existente e implementado uno nuevo en las inmediaciones del acceso para vehículos”, señala el proyecto. Además, “se limpiarán y repintarán las fachadas de los edificios y se cargarán de nuevo aquellas zonas de estas que se encuentren en peor estado, implementando también una serie de mejoras en la cubierta de los mismos, como la sustitución de la actual cubierta de fibrocemento de un tramo de la nave del servicio de limpieza”. Por último, además de adecuar los cierres, se repondrá la señalización vertical y colocarán las nuevas señales necesarias, además, se procederá al repintado de toda la señalización existente.