Los vecinos de Mieres están “hartos y perplejos” por la paralización de la obra del nuevo cuartel de la Guardia Civil. El presidente de la Agrupación Vecinal de Mieres, Arsenio Díaz Marentes, afirmó ayer que la situación de la actuación es “inconcebible”: “¿Pero no sabían que por ahí debajo pasaba un río?”, clamó el representante vecinal. Lo hace tras las, hasta ahora vagas, explicaciones del Ministerio del Interior: apuntan que los trabajos llevan medio año detenidos por la aparición de “filtraciones de agua” en el subsuelo”. “Es una tras otra”, afirmó Díaz Marentes. Y desde hace más de diez años. Fue entonces cuando se anunció la construcción de un nuevo cuartel, ante las graves deficiencias del viejo edificio. Hubo problemas absolutamente con todo: con su ubicación, con los plazos, con la búsqueda de inversiones… Hasta que, a finales del año pasado, todo parecía ya encaminado a una solución definitiva.

Y las obras empezaron. En febrero de este año, había máquinas trabajando en la parcela de la Avenida Méjico. Dotado con 3,5 millones de euros, estaba previsto que la obra finalizara en verano de 2022. “Sospechamos que lo que pasa no es un problema pequeño, que se solucione de un día para otro, y que esto va a repercutir con severidad en los plazos y en el presupuesto de la obra. Exigimos información de primera mano”, afirmó Díaz Marentes.”No saben nada ni en el Ayuntamiento”, añadió.

El alcalde de Mieres, Aníbal Vázquez (IU), escribió una carta al Ministerio del Interior, Fernando Grande-Marlaska, hace unos días. En el escrito, reclamaba información detallada sobre este proyecto y, al igual que los vecinos, sobre “las decisiones adoptadas para la reanudación de los trabajos, para el cumplimiento de los plazos y la garantía de los recursos presupuestarios para llevar a cabo todo el proyecto”. El máximo dirigente local hizo hincapié en el “malestar de los vecinos”.

“Hace más de diez años, en enero de 2011, el Delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín, anunciaba el proyecto y su licitación (a lo largo de ese mismo año) por más de seis millones de euros”, escribió Vázquez. En este repaso destacó también que “cinco años más tarde, otro Delegado del Gobierno, Gabino de Lorenzo, volvía a presentar el proyecto y comprometió su entrada en servicio para 2019”. Con 2021 ya mirando al fin de año, la parcela sigue quieta. “Decir que estamos hartos, es poco”, destacó Díaz Marentes. El representante de la agrupación afirmó que la situación es “muy molesta” para los vecinos de la zona: “Se asoman a la ventana y ven esa parcela inerte, día tras día”. Dice que, para evitar esto, solo tendrían que haber preguntado a los veteranos del barrio: “Tanto se inundaba antes, que lo llamaban ‘la playa’”, concluyó.