La ejecución presupuestaria de las inversiones ferroviarias durante 2021 fue en Asturias de las peores de España, en todos los órdenes: en Alta Velocidad, en las cuentas de Adif y en las de Renfe. A los ya de por sí malos índices de ejecución de estos entes vinculados al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana –según recoge en su informe anual de final de ejercicio la Intervención General del Estado–, los correspondientes al Principado se sitúan a la cola. La Intervención del Estado está formada por el cuerpo de funcionarios que se encarga de fiscalizar la legalidad de los gastos e ingresos en las cuentas públicas, así como de llevar la contabilidad. Según su informe, las inversiones ferroviarias en Asturias supusieron solo uno de cada cuatro euros presupuestados.

El Principado sostiene que las cuentas de las inversiones ejecutadas por el ministerio de Transportes no cuadran con las de la Intervención, y que al Ministerio le salen 287 millones, frente a los poco más de cien que suma la Intervención. Este periódico solicitó, sin éxito, información al Ministerio relativa a los detalles de las inversiones que el organismo contabiliza como ejecutadas frente a las que computa la Intervención General del Estado. Y es que las actuaciones ferroviarias son la parte más grande del pastel inversor prometido para Asturias y que no ha llegado. El Gobierno de Pedro Sánchez prometió en sus presupuestos de 2021 que invertiría en Asturias 365,6 millones de euros, pero los interventores del Estado solo registraron 148,1 millones. Es decir: Asturias se quedó sin 217,5 millones de gasto prometido. De esa cantidad, 126 millones corresponden a actuaciones vinculadas a la red ferroviaria de alta velocidad y cercanías, lo que representa el 58% del dinero comprometido y no gastado.

Por entidades. En Alta Velocidad, Adif terminó gastando únicamente 12,3 millones de los 63,1 presupuestados (19,4% de ejecución). En las cuentas generales del ente gestor de infraestructuras ferroviarias, de los 79,8 millones de euros previstos solo se gastaron 19,4, lo que supone una ejecución del 24,3%. Y en el caso de Renfe, a la postre se invirtieron en 2021 en el Principado 6,9 millones, pero el Gobierno central había comprometido en las cuentas 21,6; es decir, se gastó en la red de cercanías uno de cada tres euros previstos.

Malos datos para toda España, pero en Asturias, de los peores. Los malos datos de ejecución en las obras ferroviarias del Ministerio de Transportes se repiten en buen número de comunidades autónomas, con algunas excepciones. La más llamativa, Galicia, que en alta velocidad acabó recibiendo casi el triple de lo presupuestado (en 2021, al filo del final de año, entró en servicio el AVE en esta comunidad autónoma). También recibieron más de lo presupuestado Madrid y Aragón. En el caso de Adif, ninguna comunidad superó la ejecución prevista (con excepción de Navarra, pero se trataba del presupuesto más bajo de todos los territorios). Y en las cuentas de Renfe solo se salva la ejecución en Madrid, donde se duplicó la inversión prevista. En ninguno del resto de territorios el departamento que dirige Raquel Sánchez llegó a realizar el 70% de la inversión prevista.

Aun en ese escenario, Asturias es de las peores paradas. Es la tercera comunidad con menor ejecución en las inversiones ferroviarias de alta velocidad, la quinta por la cola en las inversiones de Adif. Más clamorosa es la situación respecto a las cuentas de Renfe: el Principado es la penúltima en ejecución presupuestaria. Esta situación contrasta con las afirmaciones del Ministerio de Transportes y sus reiteradas promesas de actuaciones para atajar la deficiente situación de la red y el servicio ferroviario en Asturias. Pese a los compromisos, ni siquiera se llegó en 2021 a gastar la tercera parte del dinero previsto.

 

Fuente: LNE