La consejera Vanesa Rodríguez espera un informe de la Inspección General para implementar mejoras organizativas y confirma tener un candidato para el puesto de director.
La estación de esquí de Valgrande-Pajares volvió a centrar el debate en la Junta General del Principado, marcada por su cierre actual debido a la falta de nieve y la imposibilidad de operar incluso con nevadas por la ausencia de personal cualificado tras las bajas del jefe de explotación y el director.
La consejera de Cultura, Política Llingüística y Deporte, Vanesa Gutiérrez, compareció para explicar la delicada situación del complejo invernal. Gutiérrez reconoció que la administración ya está trabajando en la cobertura de las vacantes del jefe de explotación y del director, anunciando incluso tener un candidato para este último puesto.
Además, la consejera afirmó estar a la espera de un informe exhaustivo de la Inspección General de Servicios. Este informe será crucial para la implementación de medidas concretas destinadas a mejorar la gestión integral de la estación.
En su intervención inicial, Gutiérrez subrayó la importancia económica de Pajares para la comarca de Lena y para toda la región, estimando un impacto anual de 6 millones de euros. Asimismo, señaló la conciencia de la necesidad de mejoras en el complejo, indicando que se están desarrollando proyectos para los que se han solicitado fondos al Instituto de Transición Justa, estando a la espera de una respuesta favorable.
La consejera también se refirió a las declaraciones del anterior director de Pajares, Javier Martínez, quien manifestó que la Consejería tenía conocimiento desde hace siete años del conflicto existente con el jefe de explotación. Al respecto, Gutiérrez destacó que el exdirector «aclaró que la seguridad está garantizada, porque sino la estación no hubiera abierto».
Durante el turno de preguntas, el diputado de Vox, Javier Jové, cuyo partido solicitó la comparecencia, insistió en conocer desde cuándo la Consejería estaba al tanto de la situación del jefe de explotación. La responsable regional respondió que tuvo conocimiento de la situación al inicio de su mandato. Jové también cuestionó el incidente del año pasado en el que una cabina del remonte principal «descarriló». Sin embargo, la consejera aclaró que la investigación interna se cerró al no encontrarse pruebas de responsabilidad «ni de esta persona ni de ninguna otra».
En resumen, el Principado de Asturias se encuentra en una fase de análisis y búsqueda de soluciones para la crisis que atraviesa la estación de Valgrande-Pajares. La elaboración de un informe por parte de la Inspección General y la pronta cobertura de los puestos clave se presentan como pasos fundamentales para revitalizar la gestión y asegurar el futuro de este importante motor económico regional.
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