El malestar entre este estrato de la población ha ido en aumento en los últimos días de manera acompasada a la propasada proliferación de comentarios en redes sociales que responsabilizan a la colectividad gitana de los brotes previos al endurecimiento de las restricciones en el marco de las medidas “4Plus”. La rumorología ha propagado diversas versiones sobre la organización de una gran fiesta familiar en la que supuestamente hubo decenas de contagios. En el proceso no han faltado insultos y descalificaciones que están causando gran “indignación” entre la comunidad gitana: “Son miles de comentarios los que se han generado en internet y todo sobre la base de una gran mentira”. Afirman sentirse víctimas del odio y del racismo.
Los portavoces de la comunidad, con la Asociación Progreso Gitano al frente, niegan para empezar de manera rotunda que se hubiera organizado algún tipo de fiesta familiar en Santullano: “Es un sinsentido decir que se ha organizado una pedida de mano o se ha celebrado una boda, como se afirma en redes sociales. Estamos siendo tan cuidadosos como el que más, ya que somos un colectivo tremendamente concienciado con esta situación y nos preocupa enormemente la salud de nuestros mayores”. En Santullano la indignación roza con la rabia: “Hay un brote en el barrio, pero no entendemos que se nos acuse a nosotros. Somos más de veinte familias y hay tres con contagios. Nadie está libre de enfermar, ya que el virus no entiende de etnias ni razas”, apunta Narciso Barrul. “Representamos el 25 por ciento del barrio y sólo se nos señala a nosotros. Además, hay brotes aún mayores en otros barrios y en bares del casco urbano que todos conocemos y nadie dice nada. Pero cuando, por desgracia, se contagia un pequeño grupo de gitanos, en vez de apoyar y dar ánimos, la reacción de muchos es insultar y lanzar bulos”.
Fuente: La Nueva España